Historias de pastoras de su llamado al ministerios

Soy Coromoto de Pérez, esposa de José Gabriel Pérez. Debo agradecer al Señor Jesús porque conmigo ha hecho cosas maravillosas; me permitió crecer en una familia cristiana, me cuidó, no permitió desviarme de su camino, trabaje en la Iglesia Bethel Barquisimeto donde me formé como Maestra de Escuela Dominical. Allí conocí a mi esposo, él predicaba en los cultos de niños. Nos butizamos juntos. Allí comenzó mi hermosa historia de amor, donde ví y sigo viendo la gloria de Dios. Nos casamos en la Iglesia "Manantial de Vida", donde pastoreaba mi hno y suegro Rev. Eligió Perez. Continuamos trabajando mi esposo y yo, él en música y yo Maestra de Escuela Dominical. Para la Gloria de Dios, allí Dios me permitió tener a mi hijo José Gabriel, quien es una bendición para la familia. Luego, por circunstancias de la vida y voluntad de Dios, salimos y comenzamos a congregarnos en la Iglesia Las Buenas Nuevas Central, donde pastoreaba el Pastor Ilidio Da Silva, seguimos trabajando, mi esposo como Músico y yo como Diaconisa y Asistente de la *Red de Matrimonios para Toda la Vida*. Tuve a mi hija Glorielys, mi segunda bendicion. Por muchos años nos mantuvimos trabajándole al Señor Dios Todopoderoso en su obra, dando lo mejor de nosotros, hasta que el Señor llamo a mi esposo al Ministerio, para mí fue duro al principio porque no quería venirme de Barquisimeto. Fue un proceso fuerte para mí. Pero al final dejé que Dios hiciera su voluntad en mí y en mi familia. Ahora estamos trabajando en la *Iglesia Cristo Viene* como líder de la *Red de Matrimonios para toda la vida y Hogares Saludables*. Ha sido una gran bendición. Agradezco a mi Dios todos los días por haberme escogido para servirle y por haberme guardando como hasta ahora lo ha hecho, servir a Dios es un honor y quiero desgastarme en Él. Nada hay en esta vida mejor que que servirle. Mi esposo José Gabriel y yo, durante la cuarentena emprendimos
junto con nuestros hijos ofreciendo tortas, tequeños, panes. Gracias al Señor nos ha ido bien, Dios ha provisto los recursos. Y hemos sido bendecidos porque Dios nos ha dotado de talentos y habilidades para emprender y ayudar la familia y la obra de Dios. "Dios bendice al varón de deseo"