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JUECES 4: 1-24 - Débora
era una profetiza y Jueza de Israel. Por 25 años JabÃn rey de Canaán habÃa
dominado la nación de Israel, porque su gran ejército y arsenal bélico les
intimidaba. Dios habla a Débora y le
dice que llame a Barac para que vaya y se enfrente a SÃsara, general del
Ejército de JabÃn; pues Él se lo entregarÃa en sus manos. Barac sintió temor y
le dijo que el irÃa pero que ella lo acompañara, ella no dudo y fue con él;
tenÃa la seguridad de la palabra que Dios le habÃa dado, sabÃa que Dios no le
fallarÃa y le dijo: “iré contigo pero no será tuya la victoria sino de una
mujer” y asà fue.
Cuando el
ejército de Israel avanzó, Dios le dio una victoria grande. Sisara huyo y llegó
a la tienda de una mujer llamada Jael, quien astutamente después de recibirle y
hacerle sentir seguro le asesina metiéndole una estaca en su sien.
Como
mujer sabia debes estar atenta a la voz de Dios, de lo que El desea que hagas,
no esperes a que otro se levante para traer los cambios a tu matrimonio, a tu
familia, a tu ciudad o a tu nación. Como Débora, necesitas levantarte y creer
que Dios está contigo y te va a usar.
Cuando soy una mujer sabia puedo hacer que otras
mujeres se unan a lo que Dios me ha dicho que va a hacer, puedo motivarlas para
que juntas alcancemos lo que Dios quiere hacer en mi nación.
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